La vía kosovar

 

Ayer (2008), 20 puntos de análisis:

1. Kosovo es desde 1999 un territorio ocupado por la OTAN y Estados Unidos. Tiene un millón ochocientos mil habitantes, de mayoría albanesa (de religión musulmana). La minoría serbia es de cien a ciento veinte mil habitantes. Con una agricultura de subsistencia, sus principales recursos económicos son, en la actualidad, las subvenciones de la Unión Europea, el trabajo relacionado con la base militar de Estados Unidos, las remesas de los emigrantes y el crimen organizado (armas, drogas, prostitución, robo de coches de lujo), con bandas criminales militares organizadas en toda Europa, para financiar la guerra contra Serbia del Ejército kosovar (KLA) y la subsistencia de sus familias.

2. Kosovo, con el apoyo fundamental de Estados Unidos y Alemania, se ha declarado unilateralmente como un Estado independiente, pero las principales decisiones políticas referentes a gasto público, programas sociales, acuerdos monetarios y comerciales seguirán en manos de la administración de las fuerzas de ocupación de la OTAN y Estados Unidos.

3. El primer ministro de Kosovo, Hashim Thaci, exdirigente del Ejército de Liberación de Kosovo (KLA), mantiene relaciones con sindicatos del crimen (principalmente tráfico de droga, de armas y prostitución) europeos, en estrecho contacto con las mafias albanesas, macedonias e italianas.

4. La ocupación de Kosovo por parte de la OTAN responde a objetivos de política exterior estadounidense. Asegura la militarización de rutas estratégicas de oleoductos y de corredores de transporte que unen Europa occidental con el Mar Negro. También protege el multibillonario tráfico de heroína, que utiliza Kosovo y Albania como lugares de tránsito para los envíos por barco de heroína afgana a Europa occidental. Kosovo es una colonia de Estados Unidos en Europa.

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Agitación en los Puertos de $hile

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Extraído del blog Comunidad de lucha

 

Más de un mes se mantuvieron en huelga lxs trabajadorxs portuarixs en Valparaíso, en conflicto directo con la empresa TPS, por exigencias en materia de turnos, seguridad laboral y mejoras salariales. Ante la negativa patronal a responder los petitorios, los medios de lucha fueron continuamente radicalizándose a la par de una represión estatal cada vez más dura, llegando al violento desalojo del sindicato de estibadores de la ciudad.

Históricamente, los puertos chilenos han visto desarrollarse un fuerte movimiento obrero, que a menudo ha desbordado las formas de lucha sindicales para combatir a la patronal. Su posición clave en la economía capitalista, en el corazón del flujo de grandes volúmenes de mercancías entre $hile y el resto del mundo, les hace ser vistos con temor por el empresariado local, especialmente por aquel que controla los puertos, por lo que el Estado (que es siempre el Estado de la clase dominante) a través de su policía se apura en reprimir y aislar todo conflicto en este sector. Por otra parte, el mismo factor hace también de estos hermanxs de clase un blanco para las maniobras políticas de quienes, con un discurso izquierdista, y concibiendo al socialismo como una forma alternativa de gestión capitalista, juzgan la importancia de ciertos sectores del proletariado no por su negatividad radical entre sus propias vidas y la producción de valor, sino por el rol que juegan dentro de la economía capitalista. Pero serán las mismas necesidades de la lucha por afirmar los genuinos intereses de nuestra clase las que harán frente a la represión y a la manipulación: la tenacidad en el combate de lxs portuarixs en Valparaíso y la rabia frente a la represión desatada, despierta la solidaridad activa en todos los puertos del país, que se rodean de barricadas y ven proliferar ataques a la policía.

El movimiento debe ser eficaz tanto en combatir a la represión del Estado, sin miramientos ni respeto por la legalidad burguesa, así como en evitar la manipulación por parte de diversas fracciones políticas que no son más que agentes del Capital presentadas como “defensoras de los derechos de los trabajadores”

En cada conflicto abierto entre los intereses inmediatos del proletariado y las necesidades de acumulación de la clase capitalista, se expresa nuestra potencialidad revolucionaria. La lucha trae a la superficie la negación profunda y radical de todo este sistema de muerte. Así, a partir de un petitorio considerado “local”, la extensión de la solidaridad proletaria y del enfrentamiento directo con la represión estatal abre grietas por las que se afirma la autonomía de nuestra clase y la necesidad de combatir ya no por mejoras particulares, que solo extienden nuestra agonía en la sociedad del capital, sino por una nueva comunidad humana sin explotación ni dominación de ningún tipo. Para esto, el movimiento debe ser eficaz tanto en combatir a la represión del Estado, sin miramientos ni respeto por la legalidad burguesa, así como en evitar la manipulación por parte de diversas fracciones políticas que no son más que agentes del Capital presentadas como “defensoras de los derechos de los trabajadores”.

El mismo movimiento debe sacudirse también de todo ropaje reaccionario, del discurso nacionalista, de la identidad obrerista, y de la tentación de personificar en los rostros más detestables la responsabilidad exclusiva de lo que es la imposición de toda una relación social. No es posible que, si los empresarios acusan a estas movilizaciones de dañar la economía nacional, la defensa oficial de los sectores movilizados se plantee en el mismo lenguaje de nuestros amos, tratando de convencerlos de que “en realidad sí queremos a nuestra patria y estas luchas afirman la economía” o de reclamar un “empresariado consciente”. ¡A no caer en estas trampas! No tenemos ningún interés en servir a ningún país. Todas las fronteras fueron gestadas para mayor beneficio de sus clases dominantes. Y es precisamente contra la Economía misma, que subordina toda nuestra existencia como proletarixs a su perpetuación, que nuestras luchas deben alzarse.

¡SOLIDARIDAD CON LOS PROLETARIXS QUE INCENDIAN LOS PUERTOS AFIRMANDO SUS NECESIDADES HUMANAS!

¡A DESARROLLAR Y AFIRMAR LA AUTONOMÍA DE CLASE CONTRA TODOS LOS AGENTES DEL CAPITAL!

¡LAS LUCHAS PROLETARIAS DE HOY SON LA PRE-FIGURACIÓN DE LAS LUCHAS DEL MAÑANA!

Más allá de la extrema derecha

Recibimos y publicamos de Barbaria

El ascenso electoral de Vox en Andalucía ha despertado la «alerta antifascista». Mientras Podemos llama a la creación de un frente popular y Susana Díaz recoge el guante, uno casi acaba olvidando el asesinato de Mbaye, el mantero senegalés al que el Ayuntamiento de Carmena persiguió como a una presa de caza hasta provocarle un infarto. También olvida, casi, los aspavientos de Kichi, el alcalde “anticapitalista”, al defender los puestos de trabajo que proporciona la venta de 400 bombas de precisión para que Arabia Saudí pueda seguir masacrando al proletariado en Yemen. Con la solemnidad de Pablo Iglesias llamando a la unidad antifascista, uno podría olvidar a Pedro Sánchez arrancándose los botones de la camisa para sacar pecho frente a todas las cámaras de Europa con la acogida del Aquarius, para después ir barriendo a los refugiados discretamente bajo la alfombra y acabar anunciando que Libia es, en realidad, un puerto segurísimo al que enviar a los migrantes que no hayan muerto en el naufragio.

Por supuesto que hay diferencias entre Vox y estos personajes. Si no las hubiera, la alternancia política dejaría de funcionar y el sistema parlamentario perdería buena parte de su gracia. Entre Vox y Podemos —como entre Lula y Bolsonaro, Sanders y Trump, Le Pen y Mélenchon— hay una fuerte base común, aquella que te proporciona el reproducir y perpetuar la catástrofe capitalista desde la poltrona parlamentaria, pero sus diferencias son de gran valía para que continúe el juego de marionetas. Por un lado, Podemos y sus “comunistas” chavistas, que amenazan la unidad de España [1], han sido de mucha ayuda a Vox para saltar al Parlamento andaluz. Por otro lado, Vox puede ser de una ayuda inestimable para el frente antifascista de Podemos y el PSOE de cara a las elecciones generales. De ahí que se le dé tantas vueltas a la abstención, se le acuse de todos los males de este mundo y se espolee al ciudadano medio, como a los caballos, para que ejercite sus derechos y elija convenientemente a su negrero. Sigue leyendo

Fascismo y antifascismo

Susanita y la tele han aupado a la extrema derecha al escenario parlamentario. No es casualidad. El pueblo vota y opina siempre lo que le dicen que ha de votar y opinar. El surgimiento de Podemos también fue fruto de los medios de comunicación, para controlar una situación social que se desbordaba.  Lo mismo sucede con el actual auge de Vox.  Los medios son la voz de su amo y del gran capital que les financia. Los  desacreditados, falsarios y  corruptos  socialistas necesitan desesperadamente el espantajo fascista para mantenerse en el  escenario político.

El auge de Vox y de la extrema derecha, acompañado por la deriva fascista del PP y  falangista de Ciudadanos, no debería sorprendernos. Es lo que toca en situaciones de crisis política, económica y social. El fascismo defiende al Estado democrático contra un proletariado que, para sobrevivir, no tiene otro camino que amotinarse contra el ataque  generalizado a sus condiciones de vida y de trabajo. Ahí está el combate de los chalecos  amarillos en Francia. Sigue leyendo

[Brasil] Motivos por los que el sistema necesita de Bolsonaro

El patriota y liberal como buen adepto de las enseñanzas del hippie nazareno crucificado, pretende seguir evangelizando (con plomo y metralla) más paganos de la Amazona y continuar con las penitencias que depara a los explotados el trabajo salariado y de este modo pueda florecer el paraiso capitalista del orden y el progreso.

Traducimos al español y publicamos a continuación un texto de los compañeros Iniciativa Revolución Universal. Consideramos que es un aporte muy importante para comprender el desarrollo histórico que actualmente devino en la victoria de Jair Bolsonaro y su partido en las elecciones de este año, así como una explicación del papel que jugaron a todas las fracciones del Capital durante este proceso de derrota en las luchas que tuvieron lugar a lo largo de una década. No obstante, pese a su claridad del texto en muchos puntos importantes, también es necesario señalar que hay aspectos que se muestran confusos a la hora de delimitar la dicotomía fascismo/antifascismo, pues hay partes donde sigue encasillando a la facción del bolsonarismo como  un partido fascista, lo cual consideramos un desacierto, pues tal como los compañeros de Barbaria lo han expresado de manera concisa: no estamos de acuerdo con la utilización del término «fascista» para el gobierno de Bolsonaro. El fascismo fue un fenómeno histórico específico, con una participación activa (no meramente electoral) de las masas, una actividad que desborda con mucho las vías democrático-electorales y con la formación de organismos paramilitares. Además, tanto el fascismo italiano como el nazismo encuentran su origen en la socialdemocracia, ya sea en sus organizaciones formales que en su dimensión de partido burgués para los obreros. Bolsonaro, por el contrario, se trata de un militar conservador y reaccionario mucho más semejante a Franco que a Mussolini.  

Pese a lo dicho, sostenemos que no deja de ser un balance de nuestra clase bastante cualitativo el cual no debería ser pasado por alto, pues se sitúa en el terreno revolucionario afirmando las posiciones comunistas más elementales por fuera y en contra de todos los discursos del gatopardismo izquierdista y socialdemócrata que busca “legitimarse” para gestionar el Capital (eso sí, bajo el supuesto de frenar la “amenaza derechista y neoliberal”, siendo que ambas fracciones son simplemente dos caras de la misma moneda). Por otra parte, aunque este texto haya sido realizado unos cuantos meses antes de las elecciones (podemos notar que desde entonces ya se vaticinaba este resultado) eso no le resta vigencia, pues contiene suficientes elementos de crítica ante hechos que siguen presentes y tampoco se limitan a “ese país”, sino que tienen y han tenido lugar en otros procesos del globo [con mayor o menor intensidad] donde los proletarios luchamos y también hemos encarado derrotas, presenciado el triunfo del reformismo que da continuidad a lo que necesita esta sociedad de la mercancía para seguir paliando sus crisis.  [Materiales]

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[Panfleto] La repulsión a los inmigrantes es la defensa del capitalismo

El rechazo a quienes huyen de una situación que originó un sistema que únicamente proporciona hambre, miseria y violencia visceral; solo puede sustentarse en la fortaleza y defensa del mundo del Capital y sus excrementos morales, jurídicos y económicos.

Hoy, se trate de venezolanos, sirios u hondureños; los proletarios desplazados en distintos rincones del planeta padecen los ataques histéricos por parte de todos los frentes cívicos y políticos, donde la ideología ciudadanista se manifiesta con toda su fuerza material. Siempre partiendo de una misma base que afirma positivamente los nauseabundos de esta civilización;

– Defensa de la propiedad

– Defensa del nacionalismo

– Defensa del trabajo asalariado

– Defensa del Estado y su jurisdicción

– Defensa de las fronteras

– Defensa de los aparatos represivos (milicia, policía, cárceles, guardias fronterizos)

– Defensa de la segregación racial

– Defensa de los valores ciudadanos, del orden, de la familia, del individualismo y las buenas costumbres

– Defensa del desarrollo y del progreso

***

Pero los proletarios en lucha que nos reconocemos en comunidad y como clase antagónica a este mundo de la mercancía; rechazaremos siempre enérgicamente todas las campañas burguesas que pretendan enjuiciar y condenar a otros explotados.

Por eso, en contraparte; siempre afirmaremos que:

No hay solución al problema de los éxodos migratorios dentro de los fundamentos y estructuras de los Estados capitalistas, porque son ellos quienes los originan. Es el capital quien crea enormes masas sobrantes deambulando en el desempleo y la precariedad; es el capital quien bajo la administración de la burguesía bolivariana ha matado de hambre y reprimido brutalmente al proletariado en Venezuela; es el capital quien lanza bombas en las ciudades sirias de Alepo y Yemen, es el capital quien por medio de la Casa Blanca envió escuadrones de la muerte a Centroamérica en los años 80s y promovió la pugna política del 2009 que incrementó la crisis en Honduras. En suma, el capital crea la catástrofe que propicia las migraciones y cuando ya no puede controlarlas recurre a sus aparatos ideológicos y a la fuerza del Estado, infundiendo miedo y confusión para que los fundamentos del sistema permanezcan inalterables.

La identidad nacional es una falacia, no hay ninguna invasión migratoria, la única invasión existente es la del capitalismo que impone su poder asesinando mediante el trabajo esclavizador, sus guerras imperialistas, y destruyendo la naturaleza con su desarrollo industrial; Por consiguiente, el enemigo no es ni será jamás el inmigrante, sino la burguesía, el capitalismo, los Estados nacionales y sus partidarios. ¡La única solución radica en reanudar la lucha de clases contra la dictadura de la economía!

¡Solidaridad internacionalista con los refugiados y perseguidos de esta guerra que el capitalismo ejerce contra la humanidad!

 ***Agrupación punto de quiebre***

Panfleto en PDF

Posmodernidad o la impostura de una falsa radicalidad

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[Recibimos y publicamos de Barbaria]

Introducción

En este texto pretendemos realizar una crítica somera a algunos de los lugares comunes ideológicos de nuestra época, lugares comunes que por comodidad llamamos postmodernos. De manera general, se pueden reconocer por la idea de que cualquier intento de buscar una emancipación radical sería un meta-relato, que buscar algún criterio de verdad u objetividad sería prueba de prepotencia y voluntad de dominio. Que no existen criterios generales y universales por los que definir la realidad del mundo y por ende no existe una búsqueda de una liberación general. Que todo es subjetivo, que la única lucha posible es la que se da desde lo cotidiano, en la microfísica de poderes, sin el riesgo de caer en esencialismos y definiciones seguras siempre peligrosas, etc.

Este texto lo escribimos desde una práctica revolucionaria y la crítica la realizamos desde la influencia que este tipo de planteamientos y autores tienen dentro de los activistas radicales que tratan de luchar contra este mundo. Por eso nos parece importante poder discutir acerca de las imposturas que se desprenden de este tipo de autores. La corriente que más ha introducido este tipo de perspectiva en “los movimientos sociales” es una versión light y reformista del movimiento autónomo histórico que tiene en Toni Negri uno de sus principales referencias y que ha hecho de las obras de Deleuze, Foucault, Guattari… presuntos manuales de radicalidad por la que tendrían que pasar los activistas “instruidos”. El reciente libro de Marina Garcés, una profesora de filosofía de la universidad y representante de este tipo de corrientes e ideas, expresa perfectamente aquello que queremos criticar. Una radicalidad aparente en formas y en los discursos que dicen querer deconstruirlo todo y una impotencia que nace desde las premisas como ella misma reconoce en el inicio del prólogo de su libro, Ciudad Princesa (pág. 11): Sigue leyendo

Epílogo: Había una vez un llamado para una reunión internacional en Kurdistán

Hace dos meses publicamos aquí un llamado para una reunión internacional en Kurdistán firmado por “Algunos militantes en Kurdistán, Irak” en relación con el desarrollo y la intensificación de la lucha de clases en la región de Medio Oriente y especialmente en Irak e Irán.

Pero una cosa es traducir y/o publicar y difundir materiales de grupos militantes como una tarea práctica para desarrollar juntos la comunidad proletaria de lucha y crítica, y otra cosa es estar de acuerdo (o no) completamente sobre el contenido del texto.

Desde entonces, se desarrolló una discusión internacional en torno a este llamamiento. Las siguientes líneas son un reflejo de esta discusión, discusión que también fue la base para el desarrollo de nuestras críticas del texto.

Cuando recibimos este llamamiento, lo consideramos como una iniciativa de nuestra clase, un esfuerzo militante para centralizarse y centralizar la acción directa del proletariado en la región de Medio Oriente, aunque pueda no corresponder con todos nuestros criterios y tampoco lo habríamos escrito de esta manera, aunque sus jalones y muchos puntos siguen sin resolverse o son inciertos, incluso muy vagos, y requieren una profundización y una aclaración… Sigue leyendo

Memoria Obrera: Chile, Septiembre 1973

Marcha Cordones Industriales, Chile 1972.

[Revista COMUNISMO No.4 (Junio 1980)] – re-publicado por Agitación Inmanente

(A continuación difundimos íntegramente este texto enfocado en el análisis de la derrota proletaria en Chile, a partir de la carta que escribieran los cordones industriales el 5 de septiembre de 1973. Este texto apareció en la revista Comunismo No 4 en Junio de 1980, 7 años después del Golpe Militar. A mantener viva la memoria y afinar la teoría revolucionaria contra la verborrea socialdemócrata).

A continuación la carta que los Cordones Industriales dirigieran a Allende el 5 de setiembre de 1973, solo unos días antes del golpe de Pinochet. Hemos considerado importante publicar este documento, ya histórico porque aún sin pretender haberlo sido, es hoy una denuncia del papel contrarrevolucionario de todas las unidades populares en el mundo entero, de como los Pinochets son imposibles sin una clase obrera que ha sido desorientada, desorganizada y desarmada políticamente por la izquierda democrática. Este documento por otro lado permite denunciar todas las peroratas sobre los “generales traidores” a las que nos tienen habituados los partidos de izquierda, y situar las causas reales de la derrota obrera en Chile, no en los enemigos que es evidente que en conjunto preparaban la desorganización de los obreros total, de dirección, de perspectiva comunista. Publicamos este documento, además, porque a menos de 7 años parecería como si nunca hubiese existido, porque todas las fuerzas democráticas de oposición han hecho todo lo posible por enterrarlo intentado que se borre para siempre de la memoria de nuestra clase, pues mete demasiado el dedo en la llaga. En fin, publicamos este documento, no porque adheramos a su contenido, sino porque resume la tragedia no solo de la clase obrera en Chile, sino de la clase obrera mundial, tragedia que seguirá reproduciéndose mientras que el proletariado no barra con sus armas a los Allende que se esconden con otros nombres en todos los países: “… no solo nos está llevando por el camino que conducirá al fascismo, en un plazo vertiginoso, sino que se nos está privando de los medios para defendernos”.

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[Libro] El MIL: Una historia política – Sergi Rosés Cordovilla

El proyecto editorial Revolución Mundial se propone esta vez publicar el libro El MIL: una historia política de Sergi Rosés Cordovilla. El libro de Rosés nos parece sin duda uno de los mejores materiales en cuanto a reapropiación programática del Movimiento Ibérico de Liberación; pues se remonta a explicar sus orígenes a finales de la década de los 60s, así como su vinculación con las luchas proletarias autónomas de principios de la década de los 70s en Barcelona, pasando por la composición de su estructura organizativa y principalmente su andamiaje teórico (aspecto cualitativo que muchas veces resulta opacado por la mitología del anti-franquismo que envuelve al MIL). Esta edición cuenta con un prefacio realizado por el ex militante del MIL, Txus de la Arena.

Para adquirir una copia impresa del libro, o bien, el mismo en versión PDF, escribir a:

revolucionmundial [ a ] riseup.net

Lucha de clases

[Extraído de la publicación Contra la Contra N°2]

¿Proletario yo?

La burguesía ha divulgado ampliamente que tras dejar de ser predominante en la producción la figura del obrero industrial, automáticamente “el proletariado ha desaparecido”.  Pero resulta que el proletariado es  y siempre fue desde su nacimiento una condición material e histórica y por consiguiente esa clase social no puede reducirse a un oficio u ocupación laboral en específico. Al prevalecer el capital prevalece la producción de mercancías, y por consiguiente también la clase que encarna la explotación de esa fuerza y tiempo de trabajo que es requerida para generar el valor de esas mercancías.

El proletariado está marcado por la desposesión perpetua de sus medios de vida y por consiguiente debe que trabajar por un sueldo;  el denominado “estilo de vida moderno consumista” que muchos asalariados pretenden llevar a cabo, dista mucho de ser el reflejo de la supuesta estabilidad y superación que se puede alcanzar bajo el capitalismo. Comprar un automóvil o costearse unas vacaciones en la playa, tener unos zapatos deportivos de marca, un plato de comida en la mesa, ir a beber cerveza los fines de semana o tener agua caliente en la ducha, pagar alquiler por una vivienda o un teléfono móvil; son “comodidades” que en cualquier país, solo pueden solventarse sin sacrificios un reducidísimo número de personas. Si hoy existe mayor circulación de mercancías que se creían inaccesibles para la mayoría de la población hace setenta años, no se debe a las bonanzas de este sistema, sino a la necesidad de crear movilidad para las exigencias del mercado mediante créditos que otorgan los bancos y nos descuentan de la nómina (con alto interés), facilitándonos dinero invisible el cual en la vida real pagamos con más trabajo.  No importa si nos ganamos “la vida” inhalando metales pesados bajo una mina, colocando vigas en una obra, en una oficina tras el computador, en un laboratorio clínico, como jornaleros pizcando cultivos para los agroindustriales, como camareras en un hotel o como mesero de un restaurante; seguimos siendo esclavos del salario, de las deudas y del incremento de trabajo que debemos realizar para pagar por un bienestar que nunca llega. Sigue leyendo

¿SOCIEDAD DE CONSUMO?

Muchas veces, atormentados por los aparatos de fabricación de la información y del pensamiento, repetimos que vivimos en una sociedad de consumo, como si fuese el caso. Sin embargo nada es más FALSO que ello. El consumo en el sentido de la satisfacción de las necesidades humanas, no decide, ni dirige nada en esta sociedad [1], o dicho de otra forma, esta sociedad no tiene en absoluto como objetivo el consumo. El consumo, los consumidores, son simples pasajes necesarios de una sociedad cuya finalidad es la producción, la valorización.

La sociedad no es de consumo, no solo para quien revienta de hambre, para quien no posee ni vivienda, ni lo mínimo necesario para la formación de su prole, (lo que es demasiado evidente) [2] ni para el resto del proletariado urbano o rural que está privado de consumir por lo miserable de su salario, aquello que el propio capitalismo le ha enseñado que es una necesidad como el teléfono, televisión en color, viajes en avión, buenos automóviles, casa de campo… etc. (lo que también es claro); sino que tampoco lo es para aquellos sectores de la pequeña burguesía o del proletariado que pueden permitirse «altos niveles de consumo” y se dedican a exhibir su lujo. En efecto, estos sectores están siempre traumatizados por el impresionante crecimiento de sus «necesidades», por la multiplicación infinita de las nuevas y «atractivas» opciones y mercancías, que desde los escaparates condenan a las que tienen en su posesión como «fuera de moda», y lo limitado de sus ingresos. Su propia carrera de consumo, se basa en esta reacción traumática con el capital y su exhibicionismo fulgurante [3], que en su propia dinámica asegura que nunca podrán consumir lo que quieren consumir, que estarán permanentemente insatisfechos, no en cuanto a su propio ser (dado que el consumo no lo realizan para satisfacer una nece-sidad de su ser) sino en cuanto a su comparación con el consumo que realizan los otros y especialmente los capitalistas… que esos sí se presentan como pudiendo realmente consumir «lo que quieren». Sigue leyendo

REIVINDICACIÓN Y REFORMA

La identificación entre reivindicación y reforma ha sido, desde tiempos inmemoriales, clave en la ideología dominante y una confusión siempre presente en las filas proletarias. Es lógico, pues es la que permite hacer pasar gato por liebre, presentar lo que interesa a las clases dominantes como igual a lo que piden los explotados y oprimidos,  las necesidades de la valorización del valor como si fuesen las necesidades humanas.

Pongamos entonces los puntos sobre las “i” definiendo el contenido socialmente opuesto de ambas.

La reivindicación es SIEMPRE expresión de lo que el explotado/oprimido necesita. En muchos casos la reivindicación es clara y se presenta bajo la forma de exigencia, de demanda basada en una relación de fuerzas, en otras es mucho más confusa y adopta la forma de un pedido… llegando hasta el extremo de ser una especie de ruego a los opresores. En algunos casos es directa y neta, en otros es confusa y piadosa, a veces se exige directamente lo que se necesita, en otros se pide al enemigo de clase como si fuera un favor, pero más allá de la forma, la relación de fuerza existe siempre y la reivindicación siempre expresa una necesidad. Sigue leyendo

Remembranza sobre la rebelión en la prisión de Attica

[Extraído de la revista Ellos no pueden parar la revuelta #4]

“Pensábamos que iba a haber una revolución y nos estábamos preparando; cuando se abrieran los portones de la cárcel, íbamos a estar listos para salir a tumbar todo este sistema.”

El camarada X, sobre los sucesos de 1971.

“Después de la rebelión muchos quedaron muertos o heridos. Pero nadie se arrepintió. Es más, si se nos hubiera presentado otra oportunidad, lo hubiéramos vuelto a hacer. Porque era mejor eso a que nos trataran como animales”.

Uno de los Hermanos de Attica.

Las condiciones infrahumanas bajo las cuales los presos subsisten en cada cárcel de esta sociedad capitalista no son ninguna novedad; comida podrida, escasez de agua, palizas por parte de los guardias, celdas en aislamiento, dormitorios atestados de suciedad, explotación intensificada en el trabajo asalariado… forman parte de la dura cotidianidad en la que sobreviven los reos en las prisiones. Sin embargo, estas condiciones constituyen a su vez un incentivo para la lucha y el asociacionismo de parte de los proletarios reclusos en contra de la prisión. La rebelión en el centro de exterminio de Attica fue un episodio más de la materialización de la crítica, no solo hacia la institución carcelaria, sino a la totalidad del sistema que la sostiene de raíz.

En un contexto de álgida lucha proletaria que recorría todo el globo, la burguesía de Estados Unidos también experimentó en carne propia el temor de que en el interior de sus fronteras se desarrollaran los mismos síntomas convulsos que tenían lugar en otras latitudes: agitación, grupos, núcleos, propaganda, estructuras de solidaridad con presos, enfrentamiento armado, etc. Ese temor se hizo realidad y debía ser contrarrestado, por consiguiente el terrorismo de Estado no demoró en aplicarse contra todos aquellos que fueron considerados “elementos desestabilizadores” o, en términos conspiranoicos “agentes del comunismo”. Sigue leyendo

Técnicas de la contrarrevolución mundial en los países árabes-musulmanes

[Extraído de Su Capital # 25]

El orden reina en Siria, Yemen, Irak, Turquía, Túnez, Egipto y cada vez más. El orden, esa expresión que alude eufemísticamente al terror contrarrevolucionario o simplemente al terror cotidiano de la clase dominante contra sus dominados. Ese orden que chorrea sangre por todas partes es la obra de la burguesía internacional en su conjunto, es la consecuencia del aislamiento de la lucha y la pasividad del proletariado a nivel mundial y en menor proporción, por la obra de las distintas facciones socialdemócratas con capacidad de canalizar al proletariado en la región que aún quedan. En este último caso a costa incluso de la propia aniquilación de sus propias organizaciones, no solo física sino moral.

Como ya dijimos los países del G.7 (EEUU, Inglaterra, Francia, Alemania, Japón, Canadá e Italia), Turquía, los países del Golfo, el FMI y el Banco Mundial establecieron un acuerdo contrarrevolucionario de actuación en las revueltas en los países árabes. Se facilitaron ayudas de tipo policial, militar y de control social a todos los países de esa región, entre ellas incluso la intervención militar extranjera por parte de los firmantes. Teniendo especial atención a Túnez, Marruecos, Jordania, Yemen y Egipto. Todo para garantizar la “transición”, a pesar de la “canalla”, hacia mayores cotas de eficacia de explotación y represión. Las consecuencias de dicha política las estamos viendo todos los días, miles de jóvenes y menores marroquíes del Rif se suben a las pateras hacia la finca España con la atenta mirada, fijada en sus nucas, de los policías modernos marroquíes, asesorados por la poli española y francesa. Tras el aplastamiento de la revuelta y las continuas detenciones de los jóvenes la policía solo les da una opción “¡pirate!”. En Egipto las revueltas detonadas finalmente por las alzas de precios de los alimentos han terminado con el encarcelamiento, el asesinato, tortura y desaparición de todos los militantes de las organizaciones catalogadas como “laicas”. Tras un baño de sangre en las calles los precios de los alimentos no dejan de subir, el terror sexual como método de control social no deja de aumentar. La única oposición “real” o supuesta oposición son los islamistas armados, en el Sinaí esa “real” insurgencia se traduce en masacres indiscriminadas contra la población local de la aviación estatal y de los sicarios del Estado Islámico. Todo para eliminar a la población sufí sostenedora durante décadas de las redes de contrabando con Gaza. Gracias a la represión masiva en Egipto y en toda la región la misma Gaza es masacrada por las fuerzas de la burguesía internacional en perfecto silencio mediático. Igualmente la única alternativa para el proletariado es la huida hacia los centros donde se ha decidido su destino de miseria y represión, hacia Europa. En Libia la “transición” se ha traducido en un sistema de explotación esclavista y de trata “negrera”, gestionado por diversos señores de la guerra islámica subvencionados por la burguesía internacional. En este contexto la migración masiva no es más que una válvula de escape para canalizar al proletariado y a la población sobrante, para exterminarla de otra forma o para que cumpla otra función de propaganda a nivel interno de los países occidentales. Sigue leyendo

Hacia una reunión internacional en Kurdistán

[Recibimos y publicamos]

Frente a la expansión de la Guerra del Medio Oriente y las nuevas oleadas revolucionarias en Irán-Irak:

Hacia una reunión internacional en Kurdistán

Compañeros:

En las últimas décadas, la sociedad capitalista en su conjunto se está dividiendo cada vez más en dos grandes ejércitos hostiles enfrentados directamente: la burguesía y el proletariado. Nuestra época, la época de la profundización de la crisis industrial y comercial mundial (y por lo tanto de la creciente lucha de clases en el mundo) ya ha pasado por varias etapas de desarrollo, a través de las cuales el proletariado ha excedido su primera etapa de fenómenos aislados y esporádicos. El crecimiento de la guerra de clases tomará cada vez más una forma internacional. Y a pesar de la guerra capitalista en Medio Oriente y los nuevos intentos del capitalismo mundial para ensanchar el círculo de la guerra con el pretexto de desmantelar las armas nucleares de Irán, el proletariado de esa región se ha unido a la actual ola internacional de lucha de clases. Las huelgas y las manifestaciones en Irán se han extendido a más de 249 ciudades que componen sus 31 provincias. Esta ola revolucionaria no terminó en Irán, pues el proletariado en Irak también entró en esta arena de lucha histórica.

​En julio de 2018, comenzó una nueva etapa de lucha de clases en Irak, con 30 víctimas fallecidas y 700 heridos durante los últimos 10 días (también más de 50 policías y agentes de seguridad resultaron heridos). El proletariado en Irak comenzó a moverse hacia la escena universal de la lucha de clases. Durante la misma semana, estallaron manifestaciones en todos los pueblos y ciudades del centro y sur de Irak, donde decenas de manifestantes resultaron heridos y cientos fueron arrestados. Manifestantes atacaron un tribunal, la sede del gobierno provincial, la sede del Hezbolá iraquí en Náyaf, incendiaron su oficina y provocaron la suspensión del tráfico aéreo. Los manifestantes en Náyaf ocuparon el aeropuerto internacional y prendieron fuego a los edificios del municipio. El gobierno cortó el internet, bloqueó las redes sociales y dictó una orden nacional para poner a las fuerzas de seguridad en alerta máxima con el objetivo de frenar el movimiento revolucionario. Por el contrario, la ciudad de Bagdad se unió al movimiento. Finalmente, el movimiento mostró su desarrollo en reiterados intentos de establecer comités en Bagdad, lo cual es un intento de coordinar las manifestaciones en todo el país. Sigue leyendo