Abordaremos algunos de los lugares comunes ideológicos de nuestra época, lugares comunes que por comodidad llamamos post-modernos. De manera general, se pueden reconocer por la idea de que cualquier intento de buscar una emancipación radical sería un metarrelato, que buscar algún criterio de verdad u objetividad sería prueba de prepotencia y voluntad de dominio. Así, no existirían criterios generales y universales por los que definir la realidad del mundo y por tanto tampoco una búsqueda de una liberación general: todo es subjetivo, la única lucha posible es la que se da desde lo cotidiano, en la microfísica de poderes, sin el riesgo de caer en esencialismos y definiciones seguras siempre peligrosas.
Esta reflexión surge desde una práctica revolucionaria y la crítica la hacemos desde la influencia que este tipo de planteamientos y autores tienen dentro de los activistas radicales que tratan de luchar contra este mundo.