Solidaridad de clase con los proletarios “refugiados” e “inmigrantes”

(Extraído de Tridni Valka)

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Compañeros, proletarios de Europa y del mundo, una vez más os dicen que vuestras condiciones de vida o incluso vuestras propias vidas están amenazadas por los “extranjeros”. Estáis siendo chantajeados con nuevos recortes en los “servicios sociales” y con la amenaza de perder el trabajo… ¡Como si este no fuera el actual programa de la clase dominante! Os empujan a defender “vuestro” país, cultura, creencias, etc. ante la amenaza de la difusión de una “religión extranjera”, de una “cultura extranjera”… ¡Como si eso significara otra cosa que la defensa de los intereses de una fracción local de la burguesía! ¡Como si eso sirviera para algo más que mantener el orden capitalista y fortalecer la ideología dominante, que nos hace aceptar nuestra propia explotación!

Nos dividen en “blancos” y “negros” o “gitanos”, “inmigrantes” y “autóctonos”, “mujeres” y “hombres”. No importa cuántas veces hemos sufrido esto, la burguesía está siempre dispuesta a jugar con estos trucos sucios! El objetivo es separar la lucha de clases desarrollada en una parte del mundo con la de otras partes. Para separar a los proletarios entre sí, para vernos no como hermanos y hermanas de clase, sino como enemigos.

La actual ola de refugiados que asola Europa desde Siria, Irak, Somalia, Afganistán, Egipto, Ucrania, etc., es el producto del aplastamiento brutal de las luchas proletarias: huelgas, motines militares e insurrecciones. Luchas desencadenadas en respuesta a la crisis capitalista y sus diversas expresiones como los aumentos de precios de los productos básicos, los alimentos, el combustible y la vivienda, el aumento del desempleo, la caída de los salarios reales, una mayor racionalización de la producción y un aumento del control por parte del Estado que afecta al proletariado mundial.

Estos refugiados fueron bombardeados, tiroteados, hambreados, torturados… también fueron engañados y canalizados por facciones locales burguesas (nacionalistas, islamistas, “separatistas”, sindicalistas o “municipalistas libertarios”) para transformar su lucha por mejores condiciones de vida y en contra de la represión del Estado, en una lucha por símbolos y banderas nacionales, partidistas o religiosas, llevándolos a odiarse y matarse entre sí.

Con el fin de evitar que el movimiento proletario que prendió fuego en los países del Magreb y del Mashreq, en Turquía, así como en numerosos países africanos, desborde las fronteras – tanto internas como las de la “Fortaleza Europea” – la fracciones burguesas Euro-Americanas (incluida Rusia) unidas en la división, apoyan todas estas sectas, milicias políticas y religiosas con dinero, armas, propaganda y la información de sus servicios de inteligencia. Al mismo tiempo, su objetivo es también asegurar sus intereses geopolíticos y económicos en la rivalidad interburguesa.

Ahora que las últimas expresiones de la lucha de nuestra clase en Siria, en Irak y en otros lugares fueron derrotadas y que su cólera se canalizó en el apoyo popular en los diferentes campos que compiten en las guerras civiles, este conflicto intercapitalista está intensificado la masacre de las masas proletarias. Y cuando los proletarios de estas regiones huyen para salvar sus vidas a otros lugares, pues no tienen otras perspectiva que el sufrimiento, son nuevamente utilizados como un látigo ideológico contra los proletarios “locales”.

Nosotros, el proletariado mundial en Europa, tenemos la responsabilidad de luchar contra la violencia que desata el Estado sobre nuestros hermanos y hermanas de clase que vienen aquí, tenemos que denunciar todos los intentos ideológicos de dividirlos en “refugiados” y “migrantes económicos”, todos los intentos de encerrarlos en campos de concentración o expulsarlos. Tenemos la responsabilidad de desafiar esa falsa solidaridad de la derecha, la izquierda o de la extrema izquierda del capital, que los consideran mera materia prima para la futura división ideológica impuesta a nuestra clase. Tenemos que organizar la lucha de clases junto a ellos y con el proletariado en el resto del mundo.

¡Tenemos la responsabilidad de asumir la confraternización y solidaridad con el suministro de alimentos, refugio, medicinas!

¡Tenemos la responsabilidad de organizarnos juntos para protegernos de la violencia del Estado!

¡Tenemos que discutir y compartir nuestras experiencias de lucha para ayudarnos a desvelar todas las trampas y manipulaciones de la burguesía!

¡Tenemos que impulsar el derrotismo revolucionario tanto en las zonas de guerra como aquí para detener los suministros militares!

¡Tenemos que luchar juntos contra las medidas de austeridad aquí y ahora!

¡Tenemos la responsabilidad de reconocer nuestra lucha en su lucha, entendiendo que la misma es dirigida por nuestros propios intereses como clase mundial explotada determinada a poner fin a toda explotación, destruyendo la sociedad de clases capitalista mediante la revolución comunista mundial!

Proletarios Internacionalistas 2015

<inter.prol@gmx.com>

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